Los tipos de yoga: los cuatro caminos esenciales

Sadhguru: Ahora mismo, las únicas cosas que existen en tu experiencia son tu cuerpo, tu mente y tus emociones. Tú las conoces hasta cierto punto, y puedes inferir que, si estas tres cosas tienen que suceder del modo en que están sucediendo, debe haber una energía que las haga suceder. Sin energía, nada de esto puede suceder. Tal vez, algunos de ustedes habrán percibido en su experiencia. Otros pueden inferir fácilmente que, para que estas tres cosas funcionen, debe haber una energía detrás de ellas. Por ejemplo, un micrófono amplifica la voz de una persona. Incluso si no sabes nada acerca del micrófono, puedes inferir que hay una fuente que lo alimenta.

4 tipos de yoga para 4 aspectos

Estas son las únicas cuatro realidades en tu vida: cuerpo, mente, emoción y energía. Cualquier cosa que quieras hacer contigo mismo debe ser en estos cuatro niveles. Cualquier cosa que quieras hacer, solo la puedes hacer con tu cuerpo, tu mente, tus emociones o tu energía. Si usas tus emociones y tratas de alcanzar lo supremo, lo llamamos Bhakti Yoga. Eso significa el camino de la devoción. Si usas tu inteligencia y tratas de alcanzar lo supremo, lo llamamos Gnana Yoga. Eso significa el camino de la inteligencia. Si usas tu cuerpo o la acción física para alcanzar lo supremo, lo llamamos Karma Yoga. Eso significa el camino de la acción. Si transformas tus energías y tratas de alcanzar lo supremo, lo llamamos Kriya Yoga. Eso significa acción interna.

Cualquier cosa que quieras hacer contigo mismo debe ser en estos cuatro niveles.
Estos son los únicos cuatro caminos por los que puedes llegar a alguna parte: bien a través del karma, gnana, bhakti o kriya —cuerpo, mente, emoción o energía—. «No, no, yo estoy en el camino de la fe. No necesito hacer nada más». ¿Hay alguien que sea solo cabeza, pero no corazón, manos y energía? ¿Hay alguien que sea solo corazón y no las demás cosas? Tú eres una combinación de estas cuatro cosas. Es solo que, en una persona, el corazón puede ser dominante; en otra persona, la cabeza puede ser dominante; aún en otra persona, las manos pueden ser dominantes, pero todo el mundo es una combinación de estas cuatro. Entonces, tú necesitas una combinación de estas cuatro. Es solo que, únicamente si se mezcla de la manera correcta para ti, funciona mejor para ti. Lo que le damos a una persona, si se te da a ti, puede que no te funcione bien, porque esa persona es mucho corazón y solo un tanto de cabeza. Es por ello que, en el camino espiritual, se pone tanto énfasis en un gurú vivo. Él mezcla el cóctel adecuado para ti; de otra manera, no hay impacto.

Unir los cuatro tipos de yoga

Sucedió una vez. Cuatro hombres caminaban por el bosque. El primero era un gnana yogui, el segundo era un bhakti yogui, el tercero era un karma yogui y el cuarto era un kriya yogui.

Generalmente, estas cuatro personas nunca pueden estar juntas. El gnana yogui siente un desdén total por los demás tipos de yoga. El suyo es el camino de la inteligencia y, por lo general, un intelectual siente un desdén total por los demás, en particular, por estas personas de bhakti, que miran hacia arriba y cantan el nombre de Dios todo el tiempo. Ellas le parecen un montón de idiotas.

Pero un bhakti yogui, un devoto, piensa que todos estos gnana, karma y kriya yogas son una pérdida de tiempo. Se compadece de los demás, que no ven que, cuando Dios está aquí, todo lo que tienes que hacer es tomar Su mano y caminar. Toda esta filosofía que divide la mente, este yoga que retuerce los huesos, no son necesarios; Dios está aquí, porque Dios está en todas partes.

Luego, está el karma yogui, el hombre de acción. Él piensa que los demás tipos de yoguis, con sus filosofías extravagantes, son simplemente unos vagos.

Pero un kriya yogui es el más desdeñoso de todos. Él se ríe de todo el mundo. ¿Acaso no saben que toda la existencia es energía? Si no transformas tu energía, ya sea que anheles a Dios o anheles cualquier otra cosa, nada va a suceder. No habrá transformación.

Estas cuatro personas no suelen llevarse bien. Pero resulta que hoy ellos estaban paseando juntos por el bosque y se desató una tormenta. Esta se hizo muy intensa y empezó a llover a cántaros. Los cuatro yoguis empezaron a correr buscando refugio.

El yogui de bhakti, el hombre de devoción, dijo: «En esta dirección, hay un templo antiguo. Vayamos allá». Él es un devoto: ¡conoce la ubicación de los templos muy bien!

Todos corrieron en esa dirección. Llegaron a un templo antiguo. Todos los muros se habían derrumbado hacía mucho tiempo; solo quedaban el techo y cuatro columnas. Los yoguis se apresuraron al templo; no por amor a Dios, sino simplemente para escapar de la lluvia.

Había una deidad en el centro. Ellos corrieron hacia ella. La lluvia caía torrencialmente desde todas las direcciones. No había otro lugar adonde ir, así que se acercaron más y más. Finalmente, no les quedó otra alternativa: ellos abrazaron a la deidad y se sentaron.

En el momento en que estas cuatro personas abrazaron al ídolo, hubo una enorme quinta presencia. De repente, Dios apareció.

En las mentes de los cuatro, surgió la misma pregunta: ¿Por qué ahora? Ellos se preguntaban: «Hemos expuesto tantas filosofías, hecho tantas poojas, servido a tanta gente, hecho tanta intensa sadhana, pero tú no viniste. Ahora, cuando estamos escapando de la lluvia, tú apareces. ¿Por qué?».

Dios dijo: «¡Al fin ustedes cuatro idiotas se reunieron!».

Si estas dimensiones no caminan juntas, los seres humanos serán un gran desastre. Ahora mismo, para la mayoría de las personas, estas dimensiones están alineadas en diferentes direcciones. Tu mente piensa y siente en una dirección, tu cuerpo físico va en otra dirección, tu energía va en otra dirección. El yoga es, simplemente, la ciencia de alinear estas tres dimensiones.

Yoga: la unión suprema

Cuando decimos «yoga», para muchos de ustedes, quizá significa algunas posturas físicas imposibles. Aquí no nos referimos a eso. Yoga simplemente significa estar en perfecta sintonía. Cuando tú estás en yoga, tu cuerpo, mente y energía y existencia están en armonía absoluta. Cuando tu cuerpo y tu mente están en un estado relajado y en un cierto nivel de dicha, puedes liberarte de muchas dolencias molestas. Digamos que vas a tu oficina y te sientas a trabajar con un dolor de cabeza muy fuerte. Tu dolor de cabeza no es una enfermedad grave, pero ese dolor punzante podría quitarte parte de tu entusiasmo por el trabajo y, quizás, parte de tu capacidad durante ese día. Pero, con la práctica del yoga, tu cuerpo y tu mente se pueden mantener en el máximo nivel posible.

La palabra «yoga» literalmente significa 'unión'. Cuando en tu consciencia experimentas todo como si fuera uno, entonces, estás en yoga. Para alcanzar esa unidad dentro de ti, existen muchos caminos. Por ejemplo, está el hatha yoga. Hatha yoga significa que empiezas con el cuerpo. El cuerpo mismo tiene sus propias actitudes, su propio ego, su propia naturaleza. Aparte de tu mente, ¿ves que tu cuerpo tiene su propio ego? Supón que dices: «Desde mañana, quiero levantarme a las cinco de la mañana y caminar por la playa». Pones la alarma. La alarma suena. Tú quieres levantarte, pero tu cuerpo te dice: «Cállate y duerme». El cuerpo tiene su propia manera de ser.

Por eso, empezamos con el cuerpo. El Hatha yoga es una manera de trabajar con el cuerpo, de disciplinarlo, purificarlo y prepararlo para niveles más altos de energía. Todos nosotros estamos vivos; todos nosotros somos seres humanos. Pero todos nosotros no experimentamos la vida con la misma intensidad, porque nuestras energías pránicas no son iguales. Diferentes personas experimentan la vida en diferentes niveles de intensidad.

Por ejemplo, alguien ve un árbol. Un árbol es solo un árbol. La mayoría de la gente ni siquiera lo ve. Alguien ve el árbol con más detalle. Un artista ve todos sus matices. Alguien más no solo ve el árbol, sino que también ve lo divino que hay en él. La visión no es la misma, porque el nivel de intensidad con el que experimentas la vida no es el mismo.

Todo el proceso del yoga consiste en llevarte desde algo que conoces a dar el siguiente paso hacia lo desconocido. Hemos hecho esta ciencia yóguica casi como una ciencia física. Supón que mezclas dos partes de hidrógeno y una parte de oxígeno: obtienes agua. Si un gran científico los junta, es agua. Incluso si un idiota los junta, es agua. De manera similar, en el yoga también, si lo hace un gran yogui o si lo hace una persona ignorante, no importa. Si hace las prácticas y la sadhana correctamente, el resultado estará a la vista.

En el yoga, estos sistemas han sido identificados. Para empezar, trabajas con el cuerpo; después, sigues con la respiración; luego, con la mente; después, con el ser interior. De esta manera, se han creado muchos pasos. Estos son solo diferentes aspectos. En realidad, no son diferentes tipos de yoga. De hecho, los abordamos todos a la vez. Es importante que, de una manera muy equilibrada, se aborden todos a la vez, como una unidad. De lo contrario, si solo trabajas con el cuerpo, es solo preparatorio en naturaleza. Entonces, en realidad, no hay división como tal. El yoga es una unión de todos estos.

Nota del editor

Extraído del discurso de Sadhguru en el programa de 21 semanas de Formación de Profesores de Hatha Yoga de la Escuela de Hatha Yoga de Isha. El programa ofrece una oportunidad sin igual para adquirir un profundo entendimiento del sistema yóguico y la competencia para enseñar hatha yoga. La próxima sesión de 21 semanas se llevará a cabo del 16 de julio al 11 de diciembre de 2019. Para obtener más información, visita www.ishahathayoga.com o escribir a info@ishahathayoga.com